Hoy me levante por la mañana y me di cuenta que no tenia pies.
-No te preocupes, aun puedes respirar.
Me dije a mi mismo para tranquilizarme, así pues, trate de caminar hasta el baño (si a eso se le puede llamar caminar) y llegando al espejo me di cuenta que tampoco tenia orejas, ni cabello, ni nariz.
-No te preocupes, aun sigue latiendo tu corazón.
Me dije a mi mismo para tranquilizarme y trate de regresar a mi habitación para dormir un poco mas, como pude llegue a mi cama y fue ahí que me di cuenta con horror, que ya no estabas tú.
-No te preocupes...
Me dije a mi mismo sin terminar y sin poderme tranquilizar, me puse del miedo a temblar.
1 comentario:
...y quise llorar, pero tarde note que mis lagrimas se fueron tambien.
Me late lo que haces.
Saludos
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